martes, 4 de agosto de 2015

El camino a San José

Estados Unidos. Dos singles de éxito de 1966:  Little Girl por The Syndicate of Sound y Psychotic Reaction de Count Five son el ejemplo del Sonido de San José. Música de garaje en deuda con el R&B de grupos como The Yardbirds, The Rolling Stones o The Pretty Things, pero solo una parte de una excitante escena local.
El sonido punk de San José era un total contraste de lo que se hacía en San Francisco, solo a 50 millas, donde el Acid Rock creció en aquella atmósfera tan bohemia. Si acaso, había una excepción, los Quicksilver Messenger Service, que tenían dos miembros -Greg Elmore y Gary Grubb- que venían de The Brogues, un quinteto excelente que había editado dos singles en un sello independiente de San José: Twilight, a su vez subsidiaria de una empresa llamada Hush Group que funcionaba desde 1958 sacando grupos de Surf o las primeras grabaciones del fino estilista Joe Simon.
En 1966, los grupos de San José que sobresalían eran The Mourning Reign, The Harbinger Complex, William Penn and The Quakes y los dos ya nombrados, que con sus humildes éxitos consiguieron atraer la atención por la escena musical de la ciudad. Sobretodo de un personaje llamado Ed Cobb. Cobb era un compositor y productor con una larga trayectoria. En 1954 había tocado el bajo y cantado en The Four Preps, un grupo vocal. Entre 1956 y 1964 habían tenido 12 singles de éxito. El último había sido uno titulado A Letter to The Beatles, casi una profecía para los nuevos tiempos.
En el verano de 1964, Cobb se había cansado de las armonías vocales y de la imagen limpia de los 4 Preps, así que rompió el grupo, abandonando esa vida para llevar adelante nuevos retos. Ya había probado la producción y había obtenido un éxito con la canción Love Letters de Katty Lester allá por 1962 y cuando su amigo Ray Harris dejó Capitol Records para irse al sello Vee Jay, encontró a Cobb un hueco en la plantilla. En cualquier caso, en 1965, Vee Jay vivía una etapa de cambios y disputas, así que Cobb y Harris decidieron formar su compañía propia de producción: Greengrass. Trabajarían de forma independiente y le ofrecerían los masters de las grabaciones a cualquier sello interesado. En este momento, Cobb también componía y vendía sus canciones, una de ellas, Every Little Bit Hurts fue un éxito para Brenda Holloway; un gran single y una de las primeras grabaciones de la Tamla Motown para la Costa Oeste.
En 1966, Greengrass había entregado tres canciones a Tower Records: Heartbeat de Gloria Jones, Secret Love de Ketty Lester y Dirty Water de The Standells. Tower Records solo estaba interesada en la canción de Ketty Lester pero adquirió las otras dos, casi como una obligación. Al final, fue éxito el Dirty Water, escrita por Ed Cobb. La primera en la frente.
The Standells eran una sensible e inteligente banda que tenía un repertorio tipicamente dedicado a las fraternidades de las universidades. Cobb les cambió su actitud y les escribió algunos clásicos del 60's Punk como el Why pick on me  o la obra maestra Sometimes good guys don't wear white.
Cobb y Harris estaban ya establecidos y convirtieron un garaje en una oficina y estudio de grabación, que a veces fue utilizado por Lou Adler, de Dunhill Records. En San José le firmaron un contrato a The E-Types, una banda de Folk Rock... y a unos tipos a los que les vieron el mismo futuro que a The Standells. Era la Banda del Reloj de Chocolate.
Chocolate Watch Band, este artículo está escrito para ellos.

Ned Torney (guitarra y voces), Mark Loomis (guitarra y voces), Jo Kemling (teclados), Tom Antone (bajo y voces) y Gary Andrijasevich (batería) habían formado el grupo a finales de 1964: una banda dura tocando R&B al estilo inglés. Tom Antone era el que tenía más experiencia ya que había tocado con The Top Siders junto a Tom Sawyers (guitarra y voces), Dave Tolby (guitarra y voces) y Ken Matthews (batería y voz). Un grupo de instrumentales cercano al estilo de The Wailers y Paul Revere and The Raiders. y creando un nexo de unión entre el 60's Punk del Noroeste y la música Surf del Sur.
La Invasión del Beat Británico cambió todo y los sets de los Top Siders se volvieron más Merseybeat. Antone dejó el grupo y se cambiaron el nombre a The Other Side, en donde entró por un tiempo Alex 'Skip' Spence, que después se fue a San Francisco para hacer unas audiciones para los Quicksilver Messenger Service, aunque acabó siendo el batería de los Jefferson Airplane.
The Other Side y los Chocolate eran buenos amigos, lo que explica todos estos cambios por 1965. Antone, Torney y Kemling dejaron la Chocolate por los Other Side, mientras Dave (ahora Sean) Tolby, se unió a Loomis y Andrijasevich. El trío sumó a un nuevo bajista: Bill Flores y un vocalista: Dave Aguilar y así quedó la formación. Mientras tanto, Danny Phay reemplazó a Tolby en los Other Side y Jim Sawyers se fue primero a The Vejtables, y después a The Syndicate Of Sound. Es un poco lioso pero es que en San José todos los caminos llevaban a... el Punk primitivo!!!
Por fin, los nuevos y definitivos Chocolate Watchband crearon un set basado en versiones de los Stones, Kinks, Yardbirds, Hollies, Pretty Things y los Animals. Solían acercarse a Los Angeles para comprar discos de importación, los grababan en cintas y se los aprendían de memoria para tocarlos después. Empezaron a tocar en la zona de la Bahía y se construyeron una buena reputación, haciendo de teloneros de The Doors, Big Brother and The Holding Company, The Lovin' Spoonful, Love y Moby Grape. En esta última banda se reencontraron con Skip Spence que estaba tocando la guitarra.
Durante un concierto en donde teloneaban a sus queridos The Yardbirds, junto a Jefferson Airplane y The Leaves, la Watchband conoció a Ron Rube. El tal Rube decía ser el manager de los Airplane y en un encuentro más tarde, Rube habló de su interés por la Chocolate, de sus ideas y contactos y de un posible contrato discográfico. Antes de la firma del supuesto contrato, la banda tuvo otra oferta. Tocaron en el Fillmore de San Francisco con The Mothers of Invention. Las entradas costaban 2,50 $ y te daban manzanas gratis a la entrada. Bill Graham, el manager de los Mothers, también se interesó por la Chocolate y se les ofreció como manager... pero los chicos pensaron que Graham no tenía mucha experiencia, así que eligieron a Rube. Más tarde, los Jefferson sí eligieron a Graham por un tiempo. Así que las historias podían haber sido diferentes si las elecciones lo hubieran sido también. Nunca se sabe.
Lo cierto es que Rube cumplió su palabra y, en parte, fue responsable de que Ed Cobb se acercara a la ciudad de San José. Con el contrato de la Watchband para Greengrass, Cobb le dejó los masters a Tower Records y todo parecía en orden y hacia adelante. El truco estaba en las condiciones del contrato; a partir de entonces Greengrass tenía los derechos sobre el nombre, y todo el control sobre el material artístico. El mismo truco que, perfeccionado, utilizaron después el equipo de Kasenetz y Katz, los compositores y sus creaciones bubblegum. Grupos como Ohio Express o The Shadows of Knight pasaron el mismo mal trago. Imagínate lo peor y acertarás. Malditas marionetas de los estudios de grabación.
El trabajo empezó enseguida con lo que sería el single de debut de la Chocolate Watchband, un original de Ed Cobb: Sweet Young Thing. Estupendo comienzo en la onda Standells, pero aún más influido por los Stones, con ese fraseo de Aguilar tan a lo Jagger, la armónica en plan Brian Jones y los riffs de guitarra parecidos al Paint it black. Lo único verdadero es que Sweet Young Thing no solo era copiar por copiar a tus ídolos. Una leyenda que persiguió a la Chocolate para los restos. En esta canción hay una atmósfera puramente norteamericana, con esa guitarra de toque oriental. Esa mezcla única de los sonidos que se hizo en California y que fue tan especial. En la cara B había una versión de Bob Dylan; It's all over now, baby blue, maravillosa y basada a su vez en la versión del mismo tema que había hecho otro de los grupos favoritos de la Chocolate: Them.
Extrañamante, el single no fue lanzado por Tower Records, que pasó las canciones a otra compañía subsidiaria: Uptown Records. En fin, incluso Tower era solo una pequeña parte de ese monstruo llamado Capitol.
Uptown era un sello de R&B negro y un grupo blanco causa alguna confusión a los dj's, así que apenas la pusieron. Esto explica que pasara desapercibida a pesar de su potencial. Inmediatamente, el grupo volvió a grabar a los estudios y a la misma vez, The Wild Angels, la película de Roger Corman protagonizada por Peter Fonda, Nancy Sinatra y Michael J. Pollard, acababa de ser estrenada. Un Lp como banda sonora iba a ser editado. Este disco iba a ser recopilado por Mike Curb y saldría con Tower Records.
Curb había trabajado con otro sello subsidiario: Sidewalk, especializado en música de películas. Se inventaba nombres de grupos ficticios como Sidewalk Sounds, Drew y otros y utilizando a los mismos músicos de sesión, contruía unos discos bastante interesantes. Hay alguna excepción como el tema de Electric Flag para la película The Trip. Ed Cobb estaba enganchado a una canción que salía en The Wild Angels: era el Blues Theme, que tocaban Davie Allan and The Arrows. Cobb estaba seguro de que iba a ser un nº uno, pero Tower Records pensaba que no era nada comercial. A pesar de todo, Cobb se la enseñó a la Chocolate Watchband e hicieron una versión con sonido de motos al principio y al final. No podía aparecer en Uptown Records por un posible conflicto de intereses, así que Cobb decidió dejársela a Hanna Barbera Records, compañía que aparte de singles de sus dibujos animados (Pebbles, Bam Bam, Huckelberry Hound...), también había editado algún éxito regional como el I see The Light por The 5 Americans, Want ad. Reader por The New Breed, Psychotic Reaction por Positively 13 O'Clock (después Mouse & The Traps) y el genial You're gonna miss me de los 13th Floor Elevators. Por supuesto, no se podía utilizar el nombre de la Chocolate Watchband y Cobb se inventó aquello de The Hogs (Los Cerdos). Este single tuvo cierto éxito y se probó unos meses después cuando la versión original de D. Allan se convirtió en un éxito en todo el país.
En la cara B del single de los Hogs estaba Loose Lip Sync Ship, composición de Dave Aguilar. Una favorita mía de toda la vida y canción misteriosa donde las haya. Para ella, Cobb pasó la producción a un personaje que firmaba como The Phantom; uno de los alias que utilizó Frank Zappa en los años 60 para grabar desde sus estudios:  Studios Z, ¡El Imperio Cucamonga! En cualquier caso, estas sesiones fueron grabadas en los Greengrass Studios, ya que por aquel momento a Zappa le habían cerrado los estudios de grabación acusándolo de corrupción. Una encerrona, claro está.
Cuatro meses después, en Diciembre de 1966, el segundo single de la Chocolate salió a la calle. En la cara A estaba Mysty Lane de Marty Siegel, poderosa y con cierto toque de garaje vampírico (?), y en la cara B una joya llamada She weaves a tender trap, una obra maestra y algo diferente a lo que habían grabado hasta ahora: una joya del Folk Rock más barroco y composición de Ed Cobb que es mi canción favorita. Realmente era solo una jugada para marcharse de Uptown Records ya que estas canciones no eran R&B.
Por fin llegó el momento de que la Chocolate se hiciera famosa en todo el país y fue con la película Riot on Sunset Strip. Allí estaban The Standells, que tocaron el tema principal... y The Mugwumps, que no hay que confundir con el grupo de Zal Yanovsky, Mama Cass Elliott y Denny Doherty, sino que eran una de aquellas creaciones de Mike Curb. La Chocolate sale en varias escenas rodadas en el Pandora's Box de Sunset Strip y participan con dos temas en la banda sonora. Don't need your lovin, que estaba basada en el clásico de Kokomo Arnold y Sleepy John Estes, Milk Cow Blues, aunque el grupo la había oido en el The Kinks Kontroversy... ¡¡Esas maracas!!
El otro tema era el Sitting here standing; que era una nueva versión de The Nazz are Blue, con aquel solo épico de Jeff Beck en el segundo lp de The Yardbirds. Son los mejores temas que grabaron, cercanos a su sonido en vivo, Punk de los 60 más que R&B y por supuesto su aparición es lo mejor de la película.
Ya estaban trabajando en lo que sería su primer Lp, editado en septiembre de 1967: No Way Out es todo un clásico. Oigas por donde lo oigas, mires por donde lo mires. Cruce perfecto entre Psicodelia y Punk... pero es que ahora es cuando las condiciones del contrato quedan claras. Cobb no estaba ni contento ni seguro con las capacidades técnicas del grupo, y tampoco le habían gustado las tres versiones que irían al Lp: Come On de Chuck Berry, In The Midnight Hour del ya desaparecido Wilson Pickett y el Hot Dusty Road de Buffalo Springfield. Así que Ed Cobb y sus amigos sustituyeron al grupo original por músicos de estudio e hicieron de las suyas. Supongo que su idea era mejorar el sonido pero rompieron el espíritu. Tomas diferentes, algunos instrumentos sí y otros no. En fin, que les preguntas a los magos de los estudios y a los músicos que participaron y todo es un misterio aún hoy.
Hablando de los temas del disco con esa psicodélica portada en donde se puede leer "Keep The 18th Amendment", unos dibujos y las caras de los miembros del grupo, está el Dark Side of The Mushroom, que recuerda a Can y que es un instrumental espacial escrito por Richie Podolor, uno de los ingenieros de sonido del disco y que después se convertiría en productor de renombre a final de los 60. Ningún miembro de la Chocolate toca en esta canción, igual que en Expo 2000, otra original de Podolor y un instrumental aún más raro todavía.
Más extraño es Gossamer Wings, supuestamente escrito por Don Bennett y Ethan McElroy, dos de los amigos de Ed Cobb, pero es la versión instrumental de Loose Lip Sync Ship, tema de Mark Loomis y Mark Aguilar, pero con unos arreglos diferentes. Hubo una toma que tenía la voz de Aguilar pero en este disco sale la voz del tal Bennett. Aunque es una extraña versión me sigo quedando con la toma del single para Hannah Barbera Records.
Don Bennett también canta en Let's talk about girls, el tema que abre el disco... ¿A quién se le ocurrió que canta mejor que Aguilar? Según cuenta Sean Tolby, de repente les metieron mucha prisa por acabar el disco y no hubo tiempo de completar las voces, así que esa es la razón de usar a otro cantante. Es un gran tema original de una banda llamada The Tongues of Truth y que fue entregada a Cobb por DJ Emperor Hudson. Esos arreglos tan furiosos fueron cosa de Cobb.
Lo mejor del disco fueron los dos temas para un single y que, por fin, tenían al grupo original cantando y tocando. El clásico Are you gonna be there (At The Love Inn) es uno de esos grandes temas del mejor garage de todos los tiempos. Punk de los 60 en estado puro. Oyéndolo, uno entiende las razones de este estilo musical: poder, maduro y controlado. Destacan los riffs de guitarra de Mark Loomis. Después estaba el No Way Out, una experimental unión de guitarras a lo Quicksilver Messenger Service y con un Dave Aguilar en pleno apogeo. Otro clásico. Los Stones nunca fueron tan perversos. Un viaje ácido increíble y, por supuesto, ese final con las cintas al revés.
Por ultimo, Gone and Passes by; una canción escrita por el cantante y que empieza como un tema de Bo Diddley para irse convirtiendo en una pieza de sitar psicodélico. Estas tres canciones son la prueba del talento de la Chocolate Watchband y que fueron poco comprendidos y ninguneados por los productores que parecían estar más en una reunión de amigos que otra cosa.
Por último, destacar en la contraportada una larga lista de dedicatorias de lo más entrañable. Personajes de La Vieja Ola como: Blancanieves, las chicas Playboy, Van Gogh, Voltaire, Anna Mae Wong, Ingmar Bergman, Mata Hari y un largo etc en donde caben personajes de aquellos días, gente querida y odiada a todos los niveles.
Durante todo ese tiempo, el grupo siguió tocando en vivo todo lo posible, incluyendo su material original entre las versiones de sus favoritos, sobre todo los Stones claro está. Desde luego, esa conexión stoniana existió y hay leyendas que dicen que Mick Jagger quiso llevar a juicio a la Chocolate al oir la versión del Come On... Haz tu elección. La Chocolate siempre dijo que la suya era la mejor... y para que no haya peleas, yo me quedo con la del Rey del Rock: Chuck Berry.
Hubo momentos de locura inspirada como cuando haciendo de teloneros de The Seeds, construyeron su repertorio a base de versiones de... ¡The Seeds! Sky Saxon no se dio cuenta... Estaba en ácido.
En diferentes reediciones del No Way Out ha aparecido el inédito I'm Aware como bonus track, firmado por "The White" (?).
El segundo Lp apareció cuatro meses después, en enero de 1968 y se llamó The Inner Mystique. No aparecía el grupo en una portada completamente anónima, sin fotos ni créditos. Solo aparecían los nombres de Ed Cobb y de sus colaboradores. Lo único cierto es que los miembros originales de la Chocolate se habían separado tras el primer Lp, pero se habían vuelto a unir en diferentes momentos y solo su pasión por lo que hacían les mantuvo amigos y unidos, de alguna manera. Tal vez, esto explica también el uso de músicos de sesión que no se sabe a ciencia cierta quienes eran. Esa combinación de un grupo para los conciertos y otro grupo para el trabajo en los estudios, siempre todos con el mismo nombre, volvió locos a los estudiosos del tema.

La contribución del grupo para este 2º Lp, fue aún menos que el anterior. No tocan en toda la cara A, que son temas de Ed Cobb (Voyage of The Trieste y Inner Mystique), así como una fiel versión de un tema del grupo de Florida We The People. En la cara B mandan las versiones y el grupo es la verdadera Chocolate Watchband, menos en un tema que no canta Aguilar (Let's go, let's go, let's go de Hank Ballard) si no Don Bennett. Por cierto, canción que también apareció en el Lp de The Standells, Try It, en 1968. Como te puedes imaginar, los Standells también sufrieron los tejemanejes oscuros de Ed Cobb. El resto del Inner Mystique tenia el I'm not like everybody else de The Kinks, una nueva remezcla del It's all over now baby blue de Dylan que ya había salido en el primer single y un tema de uno de los mejores grupos de la Bahía, The Brogues: I ain't a miracle worker. La Watchband suena bien y tocan lo que para ellos eran nuevas grabaciones, pero había algo que no quedaba claro: La desilusión de todos.
No deja de sorprender que Dave Aguilar dejara el grupo para dedicarse a dar clases de Astronomía, y eso que le habían ofrecido tener un grupo propio. Tras su marcha, la Chocolate que quedaba dejó pasar un tiempo, hasta que Sean Tolby y Bill Flores alquilaron a tres músicos para que sus contratos siguieran adelante. Después de unos meses, Loomis y Andrijasevich volvieron junto a Danny Phay, miembro de The Other Side que lo habían dejado tras un último single en el final de 1968.
Así que estaban preparados para grabar otra vez, y esta vez con sus condiciones: sin cantantes de pega, sin extraños instrumentales. El disco se llamó:  One Step Beyond, pero se iba a llamar 44 hasta que Tower Records dijo que no le gustaba aquello de los números. En cualquier caso, la Watchband se sentía fuerte y no querían las influencias de nadie ni de nada. Escribieron la mayoría de canciones y solo hay una versión del I don't need no doctor, con ocho minutos intensos de duración. Despues está Uncle Morris que es una muy buena canción y Flowers que también tiene algo especial. Devil's Motorcycle tiene un interesante trabajo de guitarras con el invitado Henry Miller de Moby Grape, grupo del que este disco tiene mucho que ver en su espíritu.
Este Lp fue editado en marzo de 1969 y la banda lo celebró... separándose. La desilusión había vuelto dado los resultados del disco, después el ex-manager Ron Rube les amenazó con un juicio por royalties. También los problemas personales de Mark Loomis pusieron el último granito de arena.
En febrero de 1970, Tolby, Phay, Andrijasevich y Flores se reunieron junto a otro guitarrista: Phil Stoma. El sonido era ahora mucho más duro y así duraron otro mes más. Tolby fue el primero en irse otra vez. Esta vez parecía ser el verdadero final de la Banda del Reloj de Chocolate.
Supongo que, al final, aquella ingenuidad con los contratos les costó un montón. Esa mezcla de típico altruismo de San Francisco y el puro negocio de Los Angeles pudo con estos chicos de San José, así como con otros. A pesar de las canciones que no les dejaron tocar, a pesar del robo de su nombre, a pesar de esos supuestos amigos y productores que hacían y deshacían sin que ellos estuvieran presentes... A pesar de todo esto, The Chocolate Watch Band pasaron a la historia. Tal vez, mitificados por sus seguidores pero sus canciones originales hablan por ellos, y sus versiones les dejan en buen lugar.
Sin resentimientos: Ed Cobb era uno de esos personajes con los que valía la pena trabajar; un pionero en cierto modo. Sin su interés, el grupo hubiera sido uno más de esos que grabaron un single y desaparecieron engullidos por la década de los 60.

CODA FINAL

"Hola Javier! Como te dije, aquí tienes la informacion sobre la Chocolate Watchband en el Purple Weekend 2005 en León.
Formación:
  • Dave Aguilar, de la formación original (1965) - voz, maracas, armónica, pandereta, theremin.
  • Alec Palao, en la formación desde el 2000 (creo!) bajo y coros.
  • Phil Stoma; Procedente de la banda de Garage de Palo Alto llamada The Hydraulic Banana, entró en la banda en 1969 y grabó con ellos el disco "One Step Beyond", guitarra solista y coros.
  • ?, Desconozco el nombre de este chico, el más joven (y el mejor vestido, muy psicodélico y elegante), y en la formación desde 2005 - guitarra rítmica Rickenbacker y Vox y coros- (creo que sustituye a Ned Torney, miembro inicial del grupo que luego se fue a The TopSiders y más tarde a The Other Side en 1965/1966, para luego retornar en 1968. Estaba en el grupo hasta su fallecimiento en 2005.
  • Gary Andrijasevich, miembro original desde 1965 en la batería.
Repertorio:
Comenzaron con Interstellar Overdrive de Pink Floyd interpretada por los cuatro músicos antes de que Dave Aguilar se subiera al escenario. Éste se les unió en la segunda canción, ante el delirio de la audiencia, y enlazaron con Expo 2000 (con theremin) y a continuación, sin recordar exactamente el orden:
  • Gone and Passes by
  • Take a Heart (The Sorrows)
  • It's all over now, baby blue (Bob Dylan)
  • I'm not a miracle worker (The Brogues)
  • No way out
  • Let's talk about girls
  • Misty Lane
  • Sweet Young Thing
  • Milk Cow Blues (The Kinks)
  • I wanna be your man (The Rolling Stones)
En los bises salieron unas Go Go's muy 60's y auténticas... y La Watchband tocó:
  • Are You Gonna be there (At the Love Inn)
  • I'm not like everybody else
Seguro que me olvido de alguna... en fin, un concierto salvaje, tanto por la banda, en perfecto estado de forma, como por el público. Espero que te sirva de ayuda. Saludos y hasta pronto."
(Coda final por David, editor del Makin Time)

EL FINAL

Espero que ya te sepas el camino a San José.